Para el diputado local Serapio Vargas Ramírez, el mal trato que reciben los jornaleros agrícolas que vienen de otros estados del sur del país a trabajar a los campos de Sinaloa, es tanto por parte del enganchador como del agricultor.
“Son todos, los enganchadores y los agricultores los que tratan mal, yo crecí en los campos agrícolas sembrando, plantando tomates, soy originario del valle de Navolato y el enganchador hace mal y el agricultor se hace pendejo y lo permite”, confirmó.
Aseguró que la ambición de los dueños del campo es interminable y es voraz, por lo que es necesario más estado y menos mercados eso no se resuelve con saliva, con visitas, con palabras, con buenas intenciones, sino con políticas públicas, premios y castigos.
Asimismo, se refirió a que el tema es también que los agricultores están buscando solamente abaratar con mano de obra y no dignificarla y eso está prohibidisino.
“Ejemplo, a un zapoteco, o a un mixteco que viene con sus hijos a buscar un ingreso dile que no trabaje si no le das una guardería, una escuela, alimentos calientes, hay que pensar como piensan ellos; ellos vienen a trabajar y no con saliva, ni con buenas intenciones, ni declaraciones, con vos, sino con recursos públicos y políticas públicas es como se va a resolver esto, con premios y castigos”, insistió.
Vargas Ramírez aseguró que el problema de México no es la corrupción ni la impunidad porque hay leyes para todos y todas pero no se están aplicando mas que cuando sucede una tragedia como la de las cuartarías en Juan José Ríos donde mueren tres niños por desnutrición.
“Siempre queremos tapar el pozo cuando ya se ahogó el niño, seguramente hay campos agrícolas que tienen situación precaria, entonces necesitamos políticas públicas del gobierno federa, particularmente en donde se garanticen los derechos humanos, pero también necesitamos que se entienda que los menores de 16 años no deben de trabajar”, abundó.
