El uso del cubrebocas generó que se dispararan los robos y los asaltos durante los picos más altos de la pandemia por COVID-19 ya que los delincuentes se aprovechan de que traían cubierta la cara, reconoció Héctor Emanuel Ibarra Flores.
En ese sentido, el presidente de Canacintra delegación Los Mochis avaló la decisión de gobierno del estado de eliminar el uso obligatorio de cubrebocas en lugares cerrados a partir de este lunes en Sinaloa.
“Cuando empezó con esto de la pandemia el traer un cubrebocas se le veía raro a la persona, a la gente; yo en alguna ocasión comenté que nunca me hubiera imaginado entrar con un cubrebocas cubierto a un banco, pero la necesidad nos obligó a eso”, resaltó.
Reiteró que la delincuencia se aprovecha de esas situaciones para no ser identificados pero primero estaba la salud, sin descuidar el tema de seguridad.
“Si definitivamente, el hecho de qué no lo traiga una persona o que lo traiga sin necesidad en un espacio abierto, ya despertaría a lo mejor alguna sospecha ya no es obligatorio”, aseguró.
Ibarra Flores dijo que ahora el uso de cubrebocas se dejará a criterio de cada persona y empresa pues ya depende de cómo se manejen y es respetable el que no lo quieran seguir portando.