Culiacán, Sinaloa. En un ambiente de fiesta familiar, 8 mil personas se dieron cita en el Jardín Evolutivo del Centro de Ciencias de Sinaloa para disfrutar del gran eclipse total de sol 2024, que en el caso de Culiacán la Luna cubrió el 97% del astro rey.
Desde las 7 de la mañana, las familias empezaron a llegar para acampar en un picnic astronómico que se extendió a lo largo y ancho del jardín, en espera del gran acontecimiento, como no se vivirá otro en Sinaloa hasta el 16 de enero de 2056.
Previo al eclipse, el Gobierno del Estado a través de CONFÍE y el CCS entregó durante sábado, domingo y lunes 16 mil 350 lentes certificados con la norma ISO 12312-2, con el fin de que culichis y visitantes pudieran observar el fenómeno de forma segura.
Además de observar las fases del eclipse a través de los lentes, las familias también lo disfrutaron en una pantalla instalada bajo las frondas de los árboles, donde se proyectó lo que se vivía en el lugar, alternadamente con tomas de lo que ocurría en Mazatlán y el portal de la NASA, en una transmisión en vivo por redes sociales a la que se conectaron 214 mil 596 usuarios.
De igual manera, el CCS colocó en el área de estacionamiento dos telescopios mediante los cuales se proyectaba indirectamente el eclipse en un muro, para que las familias se tomaran la foto del recuerdo, generando tanto interés que cientos hicieron fila para retratos y selfies.
El especialista Edgardo Molina Sauceda, responsable del Laboratorio de Ciencias de la Tierra, brindó una explicación del eclipse total a las familias reunidas frente a la pantalla y respondió a las preguntas de los presentes, principalmente niños, quienes más que expresar sus dudas dieron cátedra de sus conocimientos sobre el fenómeno.
Cuando el eclipse alcanzó su fase máxima de ocultamiento del sol, a las 11:07 horas, de las 8 mil gargantas se elevaron al unísono expresiones de júbilo, como la frase típica de los sinaloenses “¡Qué chilo!, y emocionados aplausos.
La señora Rubí López Bugarín, quien asistió en compañía familiar, compartió que fue una experiencia “muy emocionante, me gustó mucho, disfrutamos muy bonito junto con mi familia, una emoción que falta todavía mucho tiempo para volver a vivir, y sabrá Dios si me preste vida para volver a vivir esto”.
Tras culminar la fase más intensa del fenómeno astronómico las familias asistentes siguieron disfrutando del Jardín Evolutivo, con la satisfacción de haber vivido en un gran ambiente festivo y seguro el Gran Eclipse de América del Norte, también llamado el Gran Eclipse Mexicano.